Qu� necesitamos hacer en Diversidad, Equidad e Inclusi�n y qu� no en la segunda mitad del a�o
Jorgelina Albano CEO & Founder de Human inLAB
Jorgelina Albano CEO & Founder de Human inLAB
La demanda de Diversidad, Equidad e Inclusi�n disminuy� por parte de los colaboradores seg�n un art�culo de�Harvard Business Review. Claro, que se refiere a Estados Unidos, pero en Latinoam�rica seguramente suceda lo mismo, dado que todo lo que se ha aplicado en los �ltimos a�os es una copia del pa�s del norte.�
�C�mo avalo mi trabajo frente a los ejecutivos?: �La chica de Diversidad me dice que tenemos que hacer tal cosa o tal otra� me dijo la responsable de Diversidad, Equidad e Inclusi�n de una gran empresa. �Necesito avalar con datos��
Lily Zheng�en�Harvard Business Review, escribe: �El estancamiento de los esfuerzos de DEI puede atribuirse al hecho de que la mayor�a de las organizaciones nunca integraron los numerosos objetivos, programas e iniciativas surgidos despu�s de 2020 en sus operaciones principales y nunca crearon la infraestructura organizacional necesaria para convertir un �compromiso� en realidad. En t�rminos reales, los programas DEI que se iniciaron a partir de la demanda de los empleados se debilitaron con el tiempo porque nunca se tradujeron en una demanda organizacional�. Y agrega:� �Los l�deres de DEI contratados apresuradamente carec�an de la autoridad para abordar las causas fundamentales de los problemas de DEI de su organizaci�n. Sin responsabilidad para impulsar el cambio dentro de sus propios departamentos, los ejecutivos sin t�tulos de DEI podr�an f�cilmente considerar el trabajo de DEI como un aprendizaje y desarrollo �recreativo� completamente ajeno a su trabajo y responsabilidades �reales�. Sin ning�n cambio en los procesos de toma de decisiones en toda la organizaci�n para cambiar el equilibrio de poder, las aportaciones y comentarios de los grupos de empleados reci�n creados, los consejos de DEI y los comit�s de DEI no lograron generar un cambio significativo�.
Si hablamos de diversidad de g�nero los n�meros hablan y avalan estas expresiones.�
En las �ltimas semanas salieron dos importantes reportes que muestran que el n�mero de mujeres en general y especialmente en lugares de decisi�n est� por debajo de los del 2021.�
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En el informe el�WEF�atribuye la brecha de g�nero en los puestos de alto nivel a los problemas macroecon�micos a nivel mundial, lo que significa que en general�a las mujeres no se las ve capaces de liderar cambios en contextos macroecon�micos adversos. Un gran sesgo a�n por transformar.�
Por otro lado, se public� el nuevo informe�Women at work�de�Deloitte�basado en una encuesta sobre 5000 mujeres en 10 pa�ses. Los datos muestran lo siguiente.�
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Los datos dejan en claro la necesidad de convertir DEI en una demanda organizacional� y dejar atr�s el pinkwashing.�Lily Zheng resalta: En 2024, las organizaciones deber�n ampliar dr�sticamente sus esfuerzos de medici�n y rendici�n de cuentas de DEI en torno a sus objetivos de DEI si quieren conservar la confianza de su fuerza laboral y de sus componentes externos. Dice adem�s que hasta ahora los datos sobre DEI que manejan en general las organizaciones es algo as� como si ventas diera cuenta de los cursos realizados, de las horas invertidas en generar estrategia, de los aprendizajes obtenidos pero no tienen datos respecto a las ventas en s� mismas y a las ganancias generadas, datos que no sirven para nada a la hora de medir resultados.�
Es hora que DEI tambi�n tenga sus KPIs relacionados al negocio y como mencion� en otros art�culos�el negocio de DEI es el talento que la organizaci�n sea capaz de atraer e incluir en la cultura de la organizaci�n y el profundo entendimiento de cu�l es la diversidad necesaria para transitar y llegar sanos, fuertes y competitivos a los desaf�os de negocio que propone el futuro.��
En el segundo semestre del 2024 ser� muy importante determinar c�mo piensa la organizaci�n. Cu�les son los principales sesgos impl�citos por los que est�n atravesados todos los procesos y c�mo funciona �se cerebro organizacional. Es altamente probable que en general las organizaciones tengan buenas intenciones respecto de DEI pero si no se transforma en una demanda organizacional real termina produciendo cansancio y m�tricas in�tiles.�
Cada vez m�s aparecen datos que relacionan DEI a la cultura de la organizaci�n. Hace un tiempo cuando se hablaba de DEI la cultura no aparec�a como una relaci�n directa. Hoy queda claro que no se puede hablar de DEI sino se relaciona a la cultura, porque aunque haya mujeres, por ejemplo, que puedan escalar en una organizaci�n si no sienten que la cultura les proporciona ese espacio de crecimiento se ir�n.
En resumen, en el segundo semestre de 2024, las organizaciones deber�an:�
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*La autora de la nota es CEO & Founder de Human inLAB, una Soluci�n Digital que mediante gaming mide y activa la permeabilidad de la cultura organizacional a DEI.
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