El rubio platino de su melena fue la primera señal de que Camila Cabello abría un nuevo capítulo. Después llegó “I LUV IT” como adelanto de su cuarto álbum. La canción, directa, enérgica y dura como el diamante, combinaba un sample del clásico de Gucci Mane “Lemonade” con una expresiva estrofa de Playboi Carti. A los 27 años, la estrella de Miami ha llegado a un punto en el que las canciones que canta son más suyas que nunca. “Abandonar la red de seguridad de otros compositores me dio más espacio para escuchar mi propia voz”, dice sobre C,XOXO a Zane Lowe de Apple Music. “Cuando eres más joven, buscas a otras personas para que te marquen un poco el camino. Escuchas tu voz interior, pero no terminas de fiarte de ella. Después piensas ‘¿Sabes qué? Solo me voy a hacer caso a mí misma’. Me siento cómoda al mando. Salga bien o mal, sé que puedo confiar en mí”. El resultado es un cambio de atmósfera, una reinvención en toda regla o, como la propia Cabello dice con una sonrisa, su “historia de villana superfemenina”, todo bajo la imaginativa producción de El Guincho. Entre sus canciones hay odas a la Miami tropical como “Dade County Dreaming”, una colaboración con City Girls que nos lleva bailando a Collins Avenue. En “pretty when i cry” la purpurina confluye con el mismo ánimo de venganza que anima “HOT UPTOWN”, una vitriólica carta a su ex con un Drake de regreso a la época de Honestly, Nevermind. “June Gloom” y “Twentysomethings” reflejan su versión más profunda y reflexiva en disecciones de relaciones complejas y versos como “Twentysomethings, gotta have a sense of humor/When it comes to us/Don’t know what the fuck I’m doing” (Veinteañeros, necesitáis tener sentido del humor/Cuando se trata de nosotros/No sé qué coño estoy haciendo). Sin embargo, quizás la canción que mejor representa a Cabello como compositora sea “Chanel No.5”, un experimento de ambiente etéreo que define como “melodías pop con estructura de rap”. Sobre un piano fulgurante, las referencias líricas a Haruki Murakami y Quentin Tarantino evocan nubes de perfume y laca de uñas desconchada. “Es la tesis del álbum, la voz de C,XOXO”, explica a Lowe. “Una mujer que está al mando, se pinta los labios y tontea con un tío. Es mágica y sensible”.